“Dirigir no es nada más que motivar a las personas en una misma dirección” Lee Iacocca

 

Según la mitología cristiana el Santo Grial es el plato o copa usado por Jesús en la Última Cena, del cual se dice que posee poderes milagrosos. Según el relato de Robert de Boron – Joseph d’Arimathie – publicado en el siglo XII, Jesús se aparece a José de Aritmatea para entregarle el Grial y ordenarle que lo lleve a la isla de Britania.

Siguiendo esta tradición, autores posteriores cuentan que el mismo José usó el cáliz para recoger la sangre de Cristo y que, posteriormente, estableció una dinastía de guardianes para mantenerlo a salvo. La búsqueda del Santo Grial es un importante elemento en las historias relacionadas con el Rey Arturo donde se combinan la tradición cristiana con antiguos mitos celtas.

Hoy en día, las empresas tratan de buscar su Santo Grial particular, en forma de nuevos líderes que conduzcan a las compañías a obtener los objetivos buscados. Transitando en condiciones de cambio rápido e incertidumbre.

sto-grial1LA ESENCIA DEL LIDERAZGO

En mi opinión un líder es la persona capaz de ilusionar, movilizar, satisfacer y comprometer a un grupo con el fin de alcanzar unos objetivos.

La película Espartaco, protagonizada por Kirk Douglas y dirigida por Stanley Kubrick. Define de forma acertada lo que creo que es la esencia del liderazgo. Sobre todo en una de las escenas finales, en la cuál Roma perdonará la vida de los esclavos si Espartaco se entrega.

En el momento que éste se levanta y grita: “Yo soy Espartaco”. El resto de los esclavos, de forma espontánea, se van poniendo en pie y gritando lo mismo sucesivamente. Creen en él y están dispuestos a seguirle hasta las últimas consecuencias…

Han existido líderes de todos los colores, con limitaciones fisiológicas e incluso con características psicológicas muy contradictorias. De ello se desprende que los requerimientos innatos para ejercer el liderazgo son muy bajos. La constancia, el aprendizaje, la oportunidad y la confianza son claves.

Algunos de los factores necesarios para obtenerlo son los siguientes:

  • Tener claro hacia donde queremos dirigirnos e ir alcanzando metas intermedias.
  • Mostrar constantemente una actitud de servicio hacia el grupo. Escuchando, motivando y convenciendo.
  • Estar preparados y formados para la tarea en cuestión.
  • Ser capaces de adaptarnos a los cambios que se puedan producir.
  • Predicar con el ejemplo y funcionar a través de la autoridad personal.
  • Ser conscientes de nuestras fortalezas y debilidades

UN EJEMPLO

Busco en el mundo del fútbol un ejemplo que permite ilustrar los conceptos anteriormente citados. Muchos de los factores expuestos, en mi opinión se concentran en la figura de Pep Guardiola.

Un jugador aparentemente frágil que nunca fue rápido ni poseía un regate desequilibrante, tampoco destacaba por su potencia en el golpeo ni por su habilidad en el cuerpo a cuerpo. En resumen que no tenía ninguna de las cualidades que ilustran a los grandes futbolistas. En cambio cuando Guardiola distribuía el balón su equipo jugaba a una velocidad endiablada. Veía el partido un segundo antes que el resto y emanaba una seguridad que impregnaba a sus compañeros.

Tenía claro el objetivo y su forma de entender el juego, mostraba una predisposición a motivar y fue capaz de adaptarse al cambio como lo demuestran los distintos entrenadores que tuvo y su incursión en el fútbol italiano. Además era muy consciente de sus debilidades, que como hemos visto eran muchas, pero sabía explotar al máximo sus virtudes.

DIFERENCIAS ENTRE UN JEFE Y UN LÍDER.

No necesariamente un jefe tiene porque ser un líder, a pesar de que sería aconsejable que lo fuera. En el libro de José Luis Urcola, “dirigir en tiempos de cambio” se plantean algunas de las diferencias fundamentales entre un jefe y un líder.

 

Sergio Bernués Coré

www.sergiobernues.com

@sbernues